Por Juan Pablo Swett, Presidente de Asociación de Emprendedores de Latinoamérica, Pdte Multigremial Nacional de Emprendedores y Director de Asociación de Emprendedores de Chile.
Acabo de dejar la presidencia de la Asociación de Emprendedores de Chile (ASECH) y al mirar lo realizado estos 4 años, entiendo que el esfuerzo valió la pena. Con más de 22 mil asociados, hemos capacitado a miles de emprendedores, generado cientos de conexiones comerciales y defendido legalmente a decenas de personas. Si bien mi presidencia terminó, sigo como director y aún tenemos por delante el enorme desafío de crear una red Latinoamericana que replique la experiencia de nuestra asociación en Chile.
En la búsqueda de este sueño, nació la Asociación de Emprendedores de Latinoamérica (ASELA), alianza integrada por México, Colombia, Perú Argentina y Chile, para unir las iniciativas comerciales de estos estados y fomentar el escalamiento de proyectos de alto impacto. Es posible comenzar a “emparejar la cancha” para los emprendedores de la región. Las oportunidades son infinitas. Basta con saber que nuestro mercado de 17 millones de personas puede verse aumentado a 225 millones, si consideramos a todos los países implicados.
Una encuesta realizada por ASECH reveló que el 71% de los emprendedores chilenos que viajan en busca de nuevas redes para sus negocios, elige Sudamérica como destino, lo que demuestra lo atractivo que sigue siendo el mercado regional en el proceso de internacionalización.
Lo anterior obedece principalmente al ahorro de tiempo y recursos para trasladarse y también a que no existen barreras idiomáticas.
Un cono sur poderoso en emprendimiento es beneficioso para todos y los frutos ya están comenzando a verse. En México fue aprobada la ley que permite crear empresas en un día y a costo cero, siguiendo el modelo de la legislación aprobada en Chile en 2013. Otro gran triunfo es que la Asociación de Emprendedores de Argentina está impulsando la denominada “Ley ASEA”, que mejorará radicalmente la situación de los emprendedores en ese país, despertando una economía alicaída y carente de apoyo a este ecosistema. Además, a principios de julio, se impulsó la agenda de emprendimiento e innovación para la alianza pacifico, que trazará la ruta común en este tema para los próximos años.
Nuestra labor de promover leyes que favorezcan el emprendimiento en toda Latinoamérica va a continuar. Queremos que se abra una nueva arista de integración internacional y que, así como movilizamos productos o servicios, también podamos generar integración de políticas públicas en favor del emprendimiento, en beneficio de toda la región.