Corren tiempos de incertidumbre en la economía mundial. Las razones son diversas: la creciente caída del dólar, el crecimiento de la economía china, la inestabilidad del euro tras el Brexit, la irrupción de las criptomonedas o la volatilidad de la mayoría de los mercados.
Esto ha generado el decaimiento de algunas divisas frente al fortalecimiento de otras, como es el caso del peso, convirtiendo a Chile en uno de los mejores países para invertir.
Guerra de divisas mundiales
Desde la crisis, los bancos centrales han estado inyectando liquidez importante a los mercados y sacando bonos, y esto ha generado problemas cuantitativos expansivos. Los bancos han empezado a retirar círculos monetarios y el mercado ya lo está internalizando.
Según Matías Urrutia, Gerente de Mercados Financieros de VanTrust, si esto no es sincronizado va a empezarse a generar un desbalance en las monedas, que va a estar determinado principalmente por la rapidez y los estímulos monetarios de los bancos centrales de los países desarrollados. Al final, cuando una moneda se fortalece o se divide, lo hace contra otra, de ahí la guerra de monedas.
“Hoy día hay una volatilidad a la que no estamos acostumbrados, lo que se espera es que este fenómeno continúe. Los Bancos Centrales deben trabajar o tomar medidas de retiro coordinadas”, confiesa el gerente.
Además, explica cómo el dólar empezó a fortalecerse con la crisis del 2008, pero, a finales de 2017, esta ha empezado a cerrar un ciclo en el que ha estado perdiendo poder. Esto hace que algunas monedas salgan más beneficiadas que otras.
Fortalecimiento del peso chileno
Desde el último año, el peso chileno ha sido una de las monedas emergentes que más se ha fortalecido. Los factores son la ya citada debilidad del dólar, que ha acrecentado la subida del cobre, y un escenario de recuperación económica del panorama nacional. El cambio en la administración de gobierno, que ha afirmado cómo va a tratar de buscar la inversión como motor de crecimiento, ha generado expectativas de aumento en los flujos de inversión extranjera, tanto financiera como real.
Esta apreciación del peso tiene varios factores importantes, como la baja inflación que hace que el tipo de cambio real disminuya. Hace años se esperaba un alza del dólar mucho mayor de lo que ha sucedido. Por eso, hoy día esos dólares se van a mover hacia mercados donde sea más atractivo invertir, como el chileno. Chile tiene tasas reales ajustadas por riesgo atractivas para invertir, en relación a o economías desarrolladas; lo que incentiva el armar “carry trade”. Esto consiste en “pasivarse” a tasas más bajas en un país y colocar a tasas más altas en otro, generando una rentabilidad por diferencia de tasas. Una muestra sería el pasivar a tasas casi cero en Europa e invertir a tasas cercanas al 4.50 nominal en Chile.
“Por ejemplo, si invertir en Europa es cero, en comparación con cuatro de Chile, ganaríamos esa diferencia entre la captación y colocación. Un dólar bajo mueve el precio relativo de los países en el mundo; unos se ven beneficiados y otros no”, explica Matías.
Panorama internacional
Sobre las perspectivas de futuro, aparte del crecimiento de la moneda china global, está también el poderoso crecimiento de las divisas digitales. Sobre esto, el gerente de VanTrust explica cómo es la primera etapa de un cambio que viene, que es un activo virtual. Las criptomonedas llegan para quedarse, pero deben ir evolucionando, creando una legislación, los precios deben estabilizarse y la gente empezará a tomar más confianza. Se van a convertir en una moneda universal que va a permitir tener un valor físico en cualquier parte del mundo y facilitar así las transacciones globales, pero sin que las actuales desaparezcan o pierdan terreno.
Sobre la crisis que se está viviendo en Europa, el gerente explica cómo no queda claro el efecto del Brexit, ya que la libra está ahora en su nivel más alto y además su valor es más elevado que el del euro. Lo que sí ha quedado graficado, con las pasadas elecciones generales de Italia, es un descontento general, debido en cierta medida a la inmigración. Por eso se deben analizar los elementos que dan fuerza a estos poderes nacionalistas que presionan por una independencia.
Debe suceder que el Banco Central, sobre todo por parte de Alemania, va a tener que dar un empuje fuerte a la moneda, a tener que recoger las inquietudes de la gente descontenta que siente rechazo a estar unido en un bloque. “Lo cierto es que, hoy día, con China y EEUU como potencias, tenar una moneda unida es una muy buena decisión. Las expectativas respecto al euro son que va a mantenerse como moneda en unos niveles similares a los actuales”, concluye Matías.