Un buen clima laboral es un reto difícil de lograr en toda organización. No es sencillo ser una empresa feliz y congeniar las distintas personalidades y ritmos de trabajo dentro de cada equipo, pero si lo logras, todo lo demás será añadido. Aquí 10 claves que te pueden ayudar.
Los talleres de liderazgo y de trabajo en equipo han ganado terreno durante los últimos años, porque podrían ayudar a desarrollar las habilidades blandas de las personas. Sin embargo, hay muchas otras herramientas que pueden ayudarte a construir una empresa feliz.
Para Néstor Milano, director de Laborum para Chile, Panamá y Venezuela, es importante retener a los grandes talentos de hoy, al interior de una organización. “Hay períodos en los cuales se hace indispensable contar con colaboradores que aseguren un buen clima organizacional, como así también, que sean capaces de liderar equipos, en gestiones que -en el mediano y corto plazo-, mejoren la productividad de una empresa o institución. Mejoras salariales, bonos, flexibilidad laboral, son solo algunas de las formas a través de las cuales se retienen a los talentos”, dice.
Este análisis se complementa con la necesidad de desarrollar líderes ágiles que le permitan a la organización adaptarse con rapidez al entorno para entregarle certeza directiva a los equipos sobre su pertenencia a un proyecto sustentable en el tiempo. Según la Gerente General de Lee Hecht Harrison, Carolina Riquelme, “esto se resume en el concepto de accountability, que promueve la comunicación efectiva de la estrategia en los equipos, transmitiendo optimismo sobre el proyecto y su futuro, desde una visión certera de las tendencias externas del contexto empresarial”.
Diez consejos para ser una empresa feliz
- Rompe la rutina. Eso es lo que propone el Club de la Cocina, un marketplace chileno que ofrece servicios de chefs freelance tanto para empresas y personas, junto a una serie de innovadores talleres para potenciar el clima laboral. “Si hay una cosa que está clara, es que las empresas requieren que sus empleados estén más felices y se sientan más cómodos trabajando, pues, no solamente aumentan su productividad, sino que también mejoran su capacidad de innovación, a la vez que disminuye la rotación de personal”, señala el chef Luis Felipe Correa.
- Mantenerse leyendo e informándose sobre la industria de la cual se es parte convierte al colaborador en una fuente de conocimientos nuevos que puede utilizar a favor de la empresa y del desarrollo del equipo, según Laborum.
- Convoca a nuevos proyectos. Estos planes, si son a largo plazo, pueden garantizar al trabajador un lugar en la empresa. ¡Haz que cada uno se sienta parte de tus proyectos!
- Incentiva el diálogo. Abre un espacio para que tus colaboradores puedan proponer ideas. Se sentirán escuchados y, seguramente, más de algún proceso podrás mejorar con su aporte.
- Sé líder, no jefe. Liderar es una actitud que conlleva trabajo en equipo, comunicación y aprendizaje constante. Un verdadero líder forma nuevos líderes. No lo olvides.
- Promueve la creatividad. Las buenas ideas siempre son bienvenidas. Las cosas no tienen porqué hacerse siempre igual. Hay muchos caminos para lograr un mismo objetivo y aprovecharlos todos es innovar.
- Aplaude los logros de tus colaboradores. Todos necesitamos una recompensa a nuestro esfuerzo. No está demás agradecer y valorar el trabajo de cada día.
- Hazte un tiempo para conversar. Tan sólo unos minutos que puedas compartir con tu gente reforzará su sentido de pertenencia. Cuéntales lo que tienes en mente para el año que viene o los cambios que podrías hacer para mejorar la eficiencia.
- ¿Cerraste un nuevo gran contrato? Celébralo con tus colaboradores para que juntos sigan remando hacia el crecimiento de tu empresa.
- Lo bueno y lo malo. Que tus trabajadores no se enteren por terceros de cosas que son relevantes para la empresa.
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