Actualmente la investigación y desarrollo en la agricultura es uno de los factores claves para el crecimiento de esta industria. Precisamente representa el 4% de su PIB y emplea un 13% de nuestra población activa.
Esto ha hecho que cada vez se dediquen más esfuerzos a innovar en el sector y, sobre todo, a promover alimentos orgánicos y naturales para satisfacer la creciente demanda de miles de chilenos por llevar una vida más saludable.
Un referente en Latinoamérica
Todos los años, desde el 2011, se desarrolla en Espacio Riesco durante el mes de septiembre la feria más importante de la industria alimentaria en Chile y un espacio de encuentro para la mayoría de las empresas del rubro de todo el continente. Hablamos de Food and Service.
Su director comercial, Andrés Ilabaca, nos contó cómo este año se presentaron diversas innovaciones con respecto a la Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (REP).
Esta busca disminuir la generación de residuos a través de la reutilización y el reciclaje sobre el comercio justo (Cosecha Justa, empresa que busca comercializar de manera justa los productos de los pequeños agricultores nacionales) y el “packaging” (5Sense , representantes de novedosos empaques de hamburguesas, premiados en el extranjero y 100% reciclables).
“Otro de los sectores de la feria que mostró bastante innovación fue la industria del Café y el Té, que se ha ido especializando hacia el consumidor más exquisito. Por ejemplo, hoy la gente distingue lo que es un café restreto de un capuccino o un americano. Y además le gusta saber cómo cultura si es arábico, del Ecuador o de Colombia”, afirmó el organizador.
Sin embargo, hizo hincapié en que las compañías deberían empezar a añadir valor agregado a los productos, y es que el consumidor final quiere reconocer un producto “Marca Chile” y está dispuesto a pagar por ello. También señaló cómo la alta concentración de las exportaciones debe expandirse, ya que actualmente el 90% de ellas está compuesto por apenas 360 empresas.
Mayor preocupación por la salud
Recientemente, se dio a conocer el estudio de la OCDE que nos califica como el segundo país, solo por detrás de Estados Unidos, con mayor sobrepeso de la organización.
En ese contexto, el Ministro de Agricultura, Antonio Walker, recordó cómo Chile es uno de los pocos países del mundo donde comprar un kilo de frutas en las ferias es más barato que comprar un kilo de pan y esa oportunidad la tenemos que aprovechar y enseñarles desde chicos a los niños para que adquieran estos hábitos.
Es el caso de Gou Alimentos, un emprendimiento chileno que prepara platos de comida 100% naturales y que tienen la particularidad de durar un mes en el refrigerador sin alterarse en nada.
Su gestor de negocios, Nicolás Jeria, señala la importancia de esto, ya que permite a las personas tener comida natural en su casa en el momento que la deseen. Esto es perfecto para la gente que quiere comer bien pero no tiene mucho tiempo, así como para la industria, ya que, además de saludable, al durar un mes no hay mermas por vencimiento.
Otro caso señalado es Abifoods, una de las primeras empresas del país que fabrica productos totalmente sin gluten. Su fundadora, Camila Tobar, nos explicó cómo hoy están innovando para fortificar todas sus harinas sin gluten (tal como sucede con el pan blanco desde los años 70) y para crear una línea de harinas totalmente veganas, ya que otras marcas muchas veces incluyen huevo en polvo o proteína animal.
Sin embargo, hay sobre la mesa un tema por el que Camila mostró su preocupación.
“Creo que la ley de etiquetado está intoxicando a la gente, ya que, para reducir los sellos, las empresas están industrializando más los alimentos. La gente no debería fijarse en las calorías, sino en los nutrientes que tiene el producto, ya que algunos productos “saludables” en realidad son todo químicos, no te sacian y acabas comiendo más”.Camila Tobar, Fundadora de Abifoods.
Esfuerzos públicos y privados para la investigación y desarrollo
Siempre que hablamos de invertir en I+D es clave que se aúne la inversión empresarial con fondos gubernamentales.
Un caso emblemático en el sector agrario es el Centro de Innovación UC, que participa en el programa tecnológico de CORFO conocido como IFAN, que a su vez busca diversificar y sofisticar la oferta de ingredientes funcionales y aditivos naturales para la industria alimentaria.
Entre otros proyectos, están explorando el potencial culinario de distintas macroalgas chilenas combinando la cocina experimental con el conocimiento de los laboratorios. También están trabajando con nuevas harinas en base a camote y yuca y en darle nuevos usos al suero lácteo, que es desechado en casi 50% de su volumen.
Sin embargo, el subdirector de I+D del Centro UC, Francisco Pizarro, cree que el Estado debe apoyar más decididamente la investigación y desarrollo en etapas tempranas y fortalecer instrumentos como los Contratos Tecnológicos de CORFO, que son muy efectivos pero tienen bajas tasas de aprobación y aún una pequeña difusión.
Además, agregó cómo debemos fijarnos en ejemplos internacionales que, a través de impuestos al sector, generan fondos de investigación y desarrollo.
En definitiva, nuestro país tiene todos los recursos para llegar a convertirse en líder en innovación alimentaria en todo Latinoamérica.
A esto se debe sumar, además, la preocupación reciente de los chilenos hacia alimentos más orgánicos y naturales. Ahora está en las manos, tanto públicas como privadas, generar el impulso necesario para poder lograr ese objetivo a corto plazo.
Como hemos visto, ideas y emprendimientos existen de sobra.
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