Revista Valora Estrategias para tu Futuro
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Por Carolina Riquelme, Gerente General LHH Chile.
Hoy la mayoría de las empresas líderes en el mercado se encuentran inmersas en proyectos de transformación digital. Este fenómeno debe ser analizado con detención desde la gestión de personas porque se encuentra revolucionando lentamente nuestro quehacer laboral en dos aspectos fundamentales: la proyección de carrera en las organizaciones (job security) y la necesidad de estar conectados de manera estratégica con nuestros grupos de interés profesional.
En ambos casos, uno de los errores más frecuentes que cometen las personas es destinar el 100% de su tiempo a las tareas que realizan en las jornadas de trabajo sin ampliar su mirada a lo que sucede en el resto de la organización, la industria en la que se encuentran insertos y el mercado en general.
Vivimos en un mundo de conexiones, donde cultivar nuestras redes de manera estratégica es tan importante como liderar un proceso productivo. Ambos aspectos requieren de toda nuestra atención.
La experiencia de Lee Hecht Harrison (LHH) en gestionar la transición de carrera de miles de ejecutivos, avala esta reflexión. En efecto, al salir de una organización, la mayoría de los profesionales que realiza un programa de outplacement descubre las ventajas de gestionar estratégicamente su red de contacto y lo incorpora como un atributo permanente en sus desafíos de carrera futuros. En este contexto la pregunta que surge es ¿por qué no nos conectamos antes con nuestra redes?
En LHH, cuando un Career Coach le solicita a un ejecutivo en programa que haga un listado de 250 posibles contactos para iniciar su búsqueda laboral, la mayoría los observa perplejos. Sin embargo, luego de revisar las redes profesionales, amistades, compañeros de estudio y familia, hobbies, entre otros, se dan cuenta que existe un mundo de posibilidades que no han explorado porque no lo consideraban relevante para su desarrollo de carrera.
Visión de futuro
Iniciamos la presente columna mencionando la transformación digital que están viviendo las empresas y esta elección no es azarosa. Las personas ven en estos cambios una gran fuente de incertidumbre perdiendo de vista la gran cantidad de oportunidades que se generarán con estos cambios.
Para acceder a estas oportunidades debemos comenzar por hacer un insight en nuestro perfil profesional. Detectar cuáles son mis fortalezas, qué me diferencia de los demás, cuáles son los desafíos que quiero enfrentar y cómo puedo enfocarme en ellos.
Este proceso me permitirá reunirme con los actores clave en otros procesos de la empresa en la cual participo, interactuar con personas afines a mi perfil de otras organizaciones en el mercado, asistir a conferencias y seminarios, con un propósito claro que movilice mi desarrollo futuro de manera integral.
No debemos actuar como espectadores en la era de las conexiones pensando en lo bien que realizamos una tarea. La riqueza que ofrece el futuro comienza por definir nuestro propósito y las redes requeridas a cultivar para poder alcanzarlo.
